NUSO Nº 150 / Julio - Agosto 1997
Las dos caras de La Moneda
Me pregunto: cuál sería la manera posible de referirse a la historia política chilena cuando esa historia es a la vez personal, corporal, sin caer en el absorto vértigo testimonial o en el previsible ejercicio de construir una mirada inteligente o distante sobre acontecimientos que radican caóticamente -sin principio ni fin- en la memoria y cuyas huellas perviven en una atemporalidad transversal que, a menudo, asalta perceptiblemente en el presente. Pienso en cómo hablar cuando no se proviene de las ciencias sociales o de la política o de una disciplina particular que examine concienzudamente los hitos sociopolíticos y sus nexos. Pienso, desde mi lugar literario, que quizás en la palabra golpe pueda radicar una clave para aproximarme a esa historia, a la historia marcada por los acontecimientos del 11 de septiembre de 1973 en Chile.
