Los socialdemócratas daneses ganaron las elecciones con una campaña basada en cuatro ejes: la defensa de la política clásica de bienestar, impuestos más altos para los ricos,una polémica política migratoria y una política climática activa. Con una socialdemocracia fuerte, la extrema derecha parece haberse desplomado. ¿Pero hasta qué punto esta extrema derecha impuso la agenda?