La intención de este artículo es proporcionar una descripción objetiva de la perspectiva que tiene Estados Unidos, en este momento, sobre Cuba y dar algunas alternativas de lo que parece ser el futuro. Por más de treinta años EEUU ha mantenido un embargo económico contra Cuba. Esencialmente, el embargo limita el comercio, prohibe la venta de alimentos y medicinas e ilegaliza viajar a Cuba. El embargo fue intensificado aún más después de octubre de 1992, cuando el Congreso de EEUU aprobó la Ley para la Democracia en Cuba o Ley Torricelli (HR 4168). Esta iniciativa tiene por objeto aislar al régimen de Castro e incluye sanciones sobre terceras naciones y filiales extranjeras de las compañías estadounidenses que hagan negocios con Cuba. Esta medida política se suma al abrupto fin de la ayuda económica, técnica y militar soviética - ahora rusa - al régimen de Castro, que ya había comenzado una precipitada declinación de la economía cubana desde 1990. A su turno, la relación entre el Estado cubano y la sociedad está padeciendo una considerable tensión.

Exposición ante el Senado estadounidense del Presidente del Partido Independentista Puertorriqueño. El Proyecto del Senado 244, que tiene este Comité bajo su consideración, confronta al Senado de Estados Unidos con los aspectos cruciales de etnia y nacionalidad que plantea el caso de Puerto Rico. Asuntos vitales están planteados para ambos, Estados Unidos y Puerto Rico. El issue real para Estados Unidos es qué tipo de relación jurídica y política está dispuesto a contraer con un pueblo que constituye una nacionalidad históricamente distinta, que habita un territorio distinto y separado, que habla una lengua diferente, que aspira a preservar una identidad propia, y cuyos habitantes resultan ser - aunque no por elección propia - ciudadanos de Estados Unidos. La forma en que ustedes manejen este problema tendrá efectos profundos y duraderos para Estados Unidos, tanto doméstica como internacionalmente.

La característica fundamental del último cuarto de siglo en Puerto Rico es el desarrollo, a todos los niveles, de un claro e innegable proceso de integración y asimilación a los Estados Unidos. La nacionalidad puertorriqueña, Puerto Rico como pueblo, tiene, por lo tanto, un enemigo principal: la integración a los Estados Unidos. Para vencer a ese adversario y afirmar la nacionalidad puertorriqueña es necesario, antes que nada, conocerlo bien. ¿En qué consiste?, ¿cómo se desarrolla?, ¿quiénes lo componen?, ¿cómo actúa?.