Corea del Norte. Culto a la personalidad
Nueva Sociedad 86 / Noviembre - Diciembre 1986
La manera como la población norcoreana glorifica a su líder, Kim Il Sung, es única en un país socialista. Aunque se hayan dado muchas explicaciones acerca del origen de ese culto, ninguna teoría logra aclarar por completo el fenómeno. Este artículo muestra cómo los comunistas de Corea del Norte han intentado asegurar la estabilidad interna de la República Popular Democrática de Corea mediante la difusión de una lealtad absoluta a su líder. Sin embargo, y a pesar de que el culto a su personalidad haya servido como elemento unificador durante el período formativo de la sociedad norcoreana actual, representa un grave obstáculo para su modernización. Por otra parte, Kim Jong Il el hijo mayor de Kim Il Sung, fue designado en 1980 como su único sucesor y esto podría empeorar aún más las relaciones con Corea del Sur, a no ser que la transferencia de poder a Kim Jong Il fuera seguida de una reducción considerable del culto a su persona. Esto último no es del todo improbable ya que el ascenso de Kim Jong Il supone también un cambio generacional en el Partido del Trabajo de Corea.