Las Naciones Unidas, y en particular el órgano responsable de asegurar la paz en el mundo, el Consejo de Seguridad, han sido blancos de numerosas críticas. Las dificultades para reaccionar a tiempo ante masacres y guerras han revitalizado el debate acerca de la necesidad de reformar el organismo. A partir de una visión latinoamericana, el artículo analiza los diferentes proyectos y posiciones y los grupos de interés formados en torno de este tema. Más allá de los escasos resultados obtenidos hasta ahora, se concluye que la reforma del Consejo de Seguridad es imprescindible para poner a la organización a tono con los tiempos actuales.