Elite y contracultura. Proyecciones políticas de la vanguardia hispanoamericana
Nueva Sociedad 85 / Septiembre - Octubre 1986
¿Qué características ha asumido la vanguardia en Latinoamérica? ¿Cuál ha sido su significado ideológico-político en el desarrollo cultural del continente? ¿Existe un vanguardismo autóctono de profundas raíces latinoamericanas ajeno a los istmos oficiales?... Estas y otras interrogantes son abordadas por el autor de este ensayo quien establece una serie de hitos históricos para especificar el período de vigencia de nuestra vanguardia cuyo origen - dice - debe ser investigado a partir del reconocimiento del movimiento romántico latinoamericano que precede al de España, y del hecho histórico de nuestras guerras independentistas y los ulteriores esfuerzos por organizar repúblicas libres. Analiza posteriormente el futurismo el creacionismo y el ultraísmo como manifestaciones de la vanguardia identificadas con posiciones minoritarias en el contexto social latinoamericano y el surrealismo como un movimiento que rompe las barreras de clase, representando, a veces impulsos revolucionarios colindantes con el marxismo, y, otras veces, desempeñando labores de zapa para proyectos neofascistas. El autor considera finalmente que la vanguardia como concepto y "estado de ánimo" continúa siendo una atractiva abstracción y una actitud de vigilia permanente y como tal continuará desafiando la estabilidad de todo proyecto cultural reaccionario.