Existe una total coincidencia entre los fines que trataría de lograr un Convenio Bananero Mundial y algunos de los objetivos básicos de la UPEB. En otras palabras, la celebración de un Convenio Mundial de Banano se presenta en la actualidad como el camino para que la UPEB realice la tarea más importante que se le ha encomendado, a saber: lograr precios remunerativos para la fruta, mediante un razonable equilibrio entre la oferta y la demanda, que sea el resultado de un persistente esfuerzo, de los países productores, para que las exportaciones no excedan en un momento dado los volúmenes que estén dispuestos a importar a determinados niveles de precios y los países consumidores; y de estos últimos, para darle vigencia a las cuotas globales de exportación que mutuamente se convengan y a las medidas que tiendan a facilitar el acceso y promoción de la fruta en sus respectivos mercados, con el fin de aliviar en la medida de lo posible las restricciones a la producción que tengan que imponerse los países exportadores.