Tema central
NUSO Nº 77 / Mayo - Junio 1985

Poder judicial y estabilidad democrática

La importancia que para las sociedades en desarrollo y las subdesarrolladas tiene el poder judicial, es innegable. Si el supuesto es el de la mayor inseguridad o desprotección en este tipo de sociedades lo consecuente sería propugnar por un sistema jurídico permeable a intentos reformistas y un poder judicial consciente de esa realidad y dotado de los instrumentos intelectuales, económicos y burocráticos para cumplir a cabalidad su delicadísima función. Buena parte de las posibilidades de preservación del juego político en países no desarrollados está ligada a las probabilidades de perfeccionar el orden jurídico y, luego, a su real vigencia. Legislaciones obsoletas o plagadas de lagunas y contradicciones no contribuyen a preservar el debido respeto a la ley y, más bien, ponen en tela de juicio lo que ella debe tener de legitimidad. Y un poder judicial que se pierde en el leguyelismo, que permanece silencioso ante la evidencia de su propia impotencia para administrar \"pronta y cumplida\" justicia, está, ni más ni menos, notificándole a los miembros de la sociedad que el sistema de protección es precario si no inexistente. El autor, al reflexionar sobre esta polémica, advierte que no es extraño que una sociedad ineficaz en su protección sea propensa a la violencia y a las formas no-institucionales de administrar justicia.

Poder judicial y estabilidad democrática
Este artículo es copia fiel del publicado en la revista Nueva Sociedad 77, Mayo - Junio 1985, ISSN: 0251-3552


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