Aportes
NUSO Nº 153 / Enero - Febrero 1998

El futuro ya no es lo que era antes. El nuevo sentido del cambio

La transformación de la sociedad, del Estado y del sistema económico y político es inevitable y, en buena medida, ya se ha producido. Los frutos de las reformas estructurales son ambivalentes. Han permitido el control de las principales variables económicas y han iniciado la mutación de la estructura del Estado y de sus relaciones con la sociedad. Pero han agravado los problemas de desigualdad y acentuado el riesgo de fragmentación social y de pérdida de competitividad y eficiencia. A diferencia de los del pasado, estos problemas son consecuencia de la ausencia de Estado. De allí la necesidad de reconstruir el Estado, en torno a las funciones básicas de redistribución, regulación y negociación en representación del interés nacional, para encarar los desafíos del tiempo que vendrá. La reconstrucción no será posible ni útil si no comienza con la reforma y legitimación social del sistema político.

El futuro ya no es lo que era antes. El nuevo sentido del cambio
Este artículo es copia fiel del publicado en la revista Nueva Sociedad 153, Enero - Febrero 1998, ISSN: 0251-3552


Newsletter

Suscribase al newsletter