Análisis
NUSO Nº 103 / Septiembre - Octubre 1989

Conducción económica y alianzas sociales. El caso del Perú

Para el gobierno aprista de Alan García, la consolidación de un proceso de crecimiento económico dependía de sus iniciativas y de una amplia gama de actores sociales, que incluía tanto a los sindicatos y al empresariado nacional, como al capital financiero y productivo extranjero. No cabía duda de que el gobierno debía asegurar la transición de la fase de reactivación a la de crecimiento, no sólo mediante políticas económicas, sino también con alianzas adecuadas. Y las alianzas de la primera fase, con los sectores de bajos ingresos y los empresarios orientados hacia el mercado interno, implicaban altos niveles de riesgo, puesto que restringían la gama de nuevas alianzas posibles y aumentaban la presión sobre el gobierno. En el transcurso del proceso, se vio que se carecía de la capacidad de gerencia y de control económico necesarias, así como de alianzas suficientes, precipitándose el fracaso de la política económica gubernamental.

Conducción económica y alianzas sociales. El caso del Perú
Este artículo es copia fiel del publicado en la revista Nueva Sociedad 103, Septiembre - Octubre 1989, ISSN: 0251-3552


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